Revuelto Gramajo - receta

Cómo preparar el mejor Revuelto Gramajo argentino paso a paso.

Receta del Revuelto Gramajo. Cómo preparar el mejor Revuelto Gramajo argentino

REVUELTO GRAMAJO

por Otilia Kusmin

Esta deliciosa preparación, el Revuelto Gramajo, a base de huevos, jamón crudo y papas superfinitas y crocantes, es uno de los pocos platos netamente argentinos. Aunque sin duda reconocemos  influencia de la cocina anglosajona.

Cocinar el Revuelto Gramajo

1 PASO:
Pelar y cortar 1 papa mediana en julianas bien finitas. Lavarlas, secarlas y freírlas en abundante aceite, escurrir muy bien y reservar.
2 PASO:
Cortar en julianas finas 50 g de jamón crudo, dorar en una sartén bien caliente apenas aceitado hasta que comience a dorar.
3 PASO:
Batir 2 huevos con sal, pimienta y perejil, echar sobre el jamón junto revolver hasta ligar pero sin secar, deben quedar los huevos cocidos pero jugosos.
Mezclar con las papas crocantes y servir de inmediato.

Origen e historia del Revuelto Gramajo


Soy Roca, la autobiografía imaginaria de nuestro historiador Félix Luna, nos da una valiosa documentación sobre el origen de esta comida:

El presidente Gral. Julio A. Roca conoció a Artemio Gramajo cuando su Regimiento actuaba en la provincia de Tucumán (1867). Desde ese momento se transformó en amigo y compañero de toda la vida.

Vale la pena recordar un párrafo de la obra de Luna dónde Roca se refiere a Artemio Gramajo y al plato que lleva su nombre:

“Amigo en la buena y en la mala fortuna, discreto, servicial, afectuoso, caballeresco, valiente, bromista, glotón y amarrete con los pesos. Durante mi primera Presidencia lo nombré Edecán lo siguió siendo toda la vida con nombramiento o sin nombramiento. Pasará a la historia por esto y por nuestra perdurable amistad, que lo convirtió durante décadas en mi “alter ego”, pero también por haber inventado el Revuelto que lleva su nombre y se ha transformado en un plato corriente en los restaurantes de Buenos Aires. Su desaparición hace algunos meses fue el golpe más duro que recibí en mi retiro”

Su famoso revuelto fue infaltable en los desayunos de campaña, aunque cerca de los combates cuentan que lo cambiaban por pan y manteca para estar más livianos.

Artemio Gramajo era un buen gourmet y un administrador espontáneo y se ocupaba en el cuartel que los platos salieran en la óptima calidad. En su rol de Edecán y de compañía inseparable de Julio A. Roca durante largos viajes en Europa hacía listas de restaurantes a visitar, guardaba las listas de platos y vinos servidos en copiosos banquetes en Inglaterra y Francia en honor al General. También administraba las cuentas personales de la Comitiva Presidencial para no excederse en las cuentas.

Había nacido en Santiago del Estero en 1838 y murió en Buenos Aires en 1904, siguió la carrera de militar, destacándose en todas sus funciones, desde 1867 estuvo ligado a la Presidencia ocupando cargos de responsabilidad y teniendo destacada actuación militar en todas las campañas.

Hombre abierto a placeres tanto sensibles como espirituales, de todo lo que hacía directamente al bienestar propio y de quienes gozaban de su amistad.

Booking.com